El interminable ciclo de la pobreza

“Los hongos nacen en silencio” por Marosa Di Giorgio es una prosa poética realista que utiliza el simbolismo para agrandar el tema de lo corrupto que es el sistema en donde se localiza el narrador. No se puede saber exactamente a lo que se está refiriendo la autora con el texto sólo, pero la resolución descubre la posibilidad de explotación de trabajadores de clase baja.
La analogía o metáfora más importante en la prosa es entre los hongos y la gente de la raza de la narradora. Di Giorgio podría estar refiriéndose a los latinos como las víctima que se refieren, como ella es uruguaya (marosadigiorgio.com.uy) y porque ella se refiere a differentes colores. Ellos son, blancos, rosados, grises, y dorados o morados, cuales también pueden ser vistos como simbolismo y las diferentes características de los individuos. El color blanco simboliza lo puro y la paz; mientras que el color gris simboliza la melancolía y la depresión. El color rosado podría simbolizar lo femenino y la amabilidad. Los colores dorados y morados son unidas, juntos son símbolos de la riqueza y la alta sociedad, refiriéndose a la familia de la narradora y los superiores de su industria.
La narradora expresa que es consciente de lo corrupto con la frase “Yo no me atrevo devorarlos.” Desde su perspectiva, los derechos humanos de los trabajados han sido arrancado de sus propias manos, y la narradora no desea ser parte de la industria que su familia controla. Con “Cada uno trae… la inicial del muerto” la narradora enseña que no es ignorante al desafortunado
interminable ciclo de la pobreza de los de su raza. La división entre las clases socioeconómicas es el problema más grave de su tiempo al que Di Giorgio se está refiriendo.